Reflexiones: Agenda país con o sin acuerdo con el FMI

Abstract

Para quiénes no escuchan y pretenden a la brava ejercer el poder político, los escándalos callejeros, la protesta social y la oposición política les parece una terrible molestia. Quiénes están acostumbrados a opinar y no a escuchar opiniones, piensan que su verdad es la única salida y que, sus maneras, son las maneras de ser y de hacer en lo privado y en lo público. A esos políticos de antaño o a esos asesores de sube y baja estadístico, les han quedado grandes el saco de la democracia social y política costarricenses.

For those who do not listen and pretend to bravely exercise political power, street scandals, social protest and political opposition seem a terrible nuisance. Those who are used to giving opinions and not listening to opinions, think that their truth is the only way out and that their ways are the ways of being and doing in the private and in the public. For those politicians of yesteryear or those advisers of statistical ups and downs, the sack of Costa Rican social and political democracy has been too big.